DEBORAH ALMA, Cuando se Utiliza la Poesía, Para Aliviar los Dolores. ~ 365 Días de Valentía Moral

8 de julio de 2014

DEBORAH ALMA, Cuando se Utiliza la Poesía, Para Aliviar los Dolores.

DÍA 188:

Daniela Esses-Ohayon

Jacqueline Goldberg

La creatividad y la genialidad son dones… no se adquieren, sino se desarrollan. Es admirable y maravilloso que personas poseedoras de tales dones, opten por canalizarlos, entre otras cosas, por la via de la ayuda a otros seres humanos.

Este es el caso de nuestro personaje de hoy, una mujer con el mágico don de hacer poesía, el cual decidió utilizar, para “aliviar dolores”.

En 365 Días de Valentía Moral, les presentamos a Deborah Alma, una convencida de que cada persona tiene un poema que “la está esperando”, y que la poesía tiene grandes propiedades terapéuticas para todas las dolencias.

Nacida en Londres, Inglaterra, en 1964, Deborah es profesora Universitaria en la carrera de Letras, e imparte cursos de poesía desde el 2000.

En el año 2012, esta londinense comenzó a recorrer su país, a bordo de una vieja ambulancia que compró por internet. El vehículo fue transformado en una “consulta ambulante de poesía”, con la ayuda de su compañero sentimental, y también poeta, James Sheard.

“Emergency Poet”-“Poeta de Emergencia”, fue el nombre que le dio Deborah a su iniciativa, la cual consiste en ofrecer sus terapias poéticas, y “recetar” a sus pacientes, los versos adecuados que les pueden ayudar a mitigar cualquier dolor.

En el 2013, terminó su Máster en Escritura Creativa, y ha iniciado este año, la promoción de su “Tour Poeta de Emergencia”, por toda Inglaterra, con parada en el Festival Literario de East Dulwich.

Un “paciente potencial” de la “Dra. Alma”, simplemente accede al Servicio de Terapia Poética, acercándose con su “dolencia”, a la ambulancia de Deborah.

Puede ser insomnio, estrés, mal de amores, impaciencia, ansiedad… y entonces, la “Poetisa de Urgencias”, con su bata blanca, escucha con atención, las respuestas de la persona que va repasando su vida, al responder preguntas hechas por Deborah, tales como:

“¿Hace cuánto tiempo que no se detiene a reflexionar ante el mar?, o ¿Cuáles son los tres libros que se llevaría a una isla desierta?, o quizas ¿Cuándo leyó poesía por última vez?

Las curas a las inquietudes , tribulaciones y dolencias se encuentran, obviamente, tratándose de una “terapia poética”, en los textos de poesía.

“Puede ser TS Eliot ("Le dije a mi alma, quédate quieta y espera sin esperanza") o Pablo Neruda ("A nadie te pareces desde que yo te amo"). O tal vez, Seamus Heaney ("Uno no está aquí ni allí, una prisa a través de la cual pasan cosas conocidas y extrañas"). O a lo mejor, Elizabeth Jennings ("A veces el gran poema se inclina sobre la hoja y el mundo entero parece cercano").

Alma le comentó a un periodista que “las consultas son gratuitas, y las hace por su amor a la poesía”. Y agregó:

“Las mujeres, curiosamente, son más proclives a pasar por mi consulta. No sé si es que leemos más poesía o es que tenemos menos problemas para sincerarnos que los hombres".

Relata también que le han llegado pacientes aquejados de cáncer, o gente que ha perdido a un ser querido y no soporta el dolor.

Alma los atiende de forma amorosa, y afirma que la poesía “verdaderamente tiene propiedades terapéuticas para todas las dolencias, y es capaz de activar en cada persona un mágico resorte que lo sana” .

Algunos de los que nos leen podrán diferir de este tipo de “terapia”, la cual, por supuesto, no sustituye a ninguna otra de índole médica. La londinense lo tiene y deja bien claro.

Pero lo que resulta innegable, es que Deborah Alma, eligió Hacer la Diferencia, y con sus acciones que salen del corazón, y en nada tienen que ver con el bolsillo, es una fuente de inspiración para nosotros.