JOSÉ ANDRE MONTAÑO, EL Niño que Toca el Piano con el Corazón.

DÍA 177: 

El ama la música!

Cuando se sube al escenario, la alegría se apodera de cada átomo de su cuerpo, y su talento, eriza la piel de quien lo ve y escucha…

Hoy en 365 Días de Valentía Moral, honramos al niño boliviano, José Andre Montaño, músico, invidente de nacimiento, y con un sentido del oído, que es el mayor de sus tesoros.

Su condición no le ha impedido obtener grandes logros a su corta edad. Apenas cuenta con nueve años!!!

Lo que se pueda decir de este chico, “es poco”…Es encantador, derrocha carisma, tiene “cancha”, y posee una enorme pasión y un extraordinario don para interpretar la música. Ni hablar del jazz, que es su ritmo predilecto!!

En las entrevistas que le realizan, responde con mucha seguridad:

“Yo soy de Cochabamba, Bolivia. Nací el 20 de Marzo del 2005. Vivimos en Cochabamba, pero mi papá es de Riberalta Beni, y mi mamá de Oruro.  No tengo hermanos de sangre, pero gracias a Dios,tengo muchos hermanos musicales…muchos amigos músicos que son como mis hermanos.”

Pink Floyd, Miss Rossy, Los Simpson, Barney y canciones infantiles, era lo que escuchaba José Andre, a quien le empezó a gustar la música, a los tres años. Ahora está aprendiendo a leer y escribir!

“Mi primera presentación en casa fue en la navidad del 2009. Canté villancicos y canciones navideñas, y mi primer concierto fue con una canción folklórica, una cueca boliviana que se llama “En las Puertas de un Jardín”. Yo cantaba y mi papá tocaba la guitarra”.

“Toco batería, afuche, maracas, pandereta, yenbe, timbales, piano, teclado, y me agrada mucho tocar blues con la armónica, cuenta el niño, en una de las múltiples entrevistas que le han hecho. Es un autodidacta.

La historia de vida de José, es interesante y conmovedora, pues en él coexisten, un talento innato, y la tenacidad,  perseverancia, y fe de su padre, el guitarrista Roberto Montaño,quien renunció a todo, para dedicarse por entero a su hijo.

Diseñó un plan de vida a largo plazo, tras decidir acompañarlo. “Hice un análisis de lo que él podía hacer, de lo que nunca iba a poder hacer, y qué era lo que lo iba a hacer feliz”. 

Pero él me sorprendió en todo...y a los cinco años tenía una banda. Cuando era bebé era más fácil, porque dormía como todo recién nacido, tenía tiempo para nutrirme de información en Internet, sobre diferentes casos de chicos no videntes, no solo de Bolivia, sino de todo el mundo, y empecé a absorber experiencias de esas familias, inclusive viajé para charlar con los papás, y conocer a los niños. Así volvía y seguía armando lo mío”, relata el padre del niño prodigio.

“Pataleaba cuando escuchaba la música que le cantaba con la guitarra.  A los dos años, empezó a marcarme el ritmo de forma impresionante, pero realmente ahí no me di cuenta, ni le di importancia, y seguíamos cantando y pasándola bien. Aunque aún no hablaba, José se esforzaba por cantar”, continua.

Es más que evidente el rol fundamental que ha desempeñado el señor Montaño, en el merecido y prematuro éxito de José Andre.

La primera canción que cantó fue un tema de Octavia, como a los tres años. Ahí ya había algo en mí que sabía que él iba a ser’.

En ocho años, el esfuerzo de ambos, ya empezó a dar grandes frutos.

“Mi hijo soñaba con el sonido del mar y un día, cuando fuimos por primera vez a la playa, me dijo: ‘Papá, necesito mi teclado. Tengo una melodía y quiero tocarla’”. Y así ha sido testigo de las maravillosas creaciones de su hijo músico.

El chico no inspira lástima ni compasión, y a decir verdad, José Andre, no hace música, Él es la Música!

Gestor, creador e intérprete de su existencia, pareciera que José está consciente de su “forma del alma” y de la alegría que le produce comunicar sus sentimientos. “Siento mucha alegría, emoción y felicidad. Puedo sentir la alegría  de  la gente,  una energía que me hace sentir muy contento”.

Ya grabó su primer CD, llamado “Ama a Todos”, en el cual el mismo se compuso tres canciones,e incluyó  piezas de jazz, blues y bossanova.

“He elegido este nombre de, “Ama a Todos”, porque quiero compartir con la gente mi felicidad y mi pasión por la música. Quiero enviarles  a todos, un mensaje de alegría y felicidad. Que se esfuercen y trabajen para ser mejores cada día”.

José Andre no hace la diferencia. Él es la Diferencia!!! En 365 Días de Valentía Moral, nos llena de alegría y satisfacción, poder llevarles a ustedes, ejemplos de vida, inspiradores, motivadores, emotivos.

Gente como José Andrés, hace que tengamos esperanza de que puede haber una Humanidad, que precisamente sea eso: Más Humana.

Hagamos todos la Diferencia!

Fuentes:
www.paginasiete.bo
www.lo www.taringa.net/.../Nino-ciego-toca-piano-con-el-corazon-Prodigio-bolstiempos.com/.../jose-andre-montano-la-musica