A,
Mery Silberman
La vida del personaje que elegimos para esta nota, fue intensa, apasionada y para nada, apegada a la rutina. De ella, quedan sus pinturas, el aroma de las flores que amó, y su potente rebeldía.
En 365 Días de Valentía Moral, hoy hacemos referencia a una de las artistas latinoamericanas más emblemáticas del siglo XX, Frida Kahlo, cuyo talento e inteligencia, de grado superlativo, logró una trayectoria notable de valores humanos y valentía personal.
Magdalena del Carmen Frida Kahlo Calderón, mejor conocida como Frida Kahlo, nació en Coyoacán, México, el 6 de julio de 1907, en la casa de sus padres y ahora convertida en el Museo de Frida, al cual llaman "La Casa Azul".
En la vida siempre se necesita contar con una cuota importante de buena suerte…En el caso de esta artista, digamos que su cuota no fue tan grande, ya su vida estuvo marcada por el infortunio de una enfermedad infantil, la poliomielitis, y por un grave accidente en su juventud, que la mantuvo postrada durante largos periodos, llegando a someterse a 32 operaciones quirúrgicas.
Sin embargo, nada de ello fue un obstáculo para tomar la decisión de dedicarse a la pintura, por medio de la cual logro reflejar sus estados de ánimo, sus sentimientos, su dolor, su angustia y sufrimiento, así como también su dignidad y su determinación de vencer a la muerte y al dolor.
Su creacion de aproximadamente 200 obras, llevaron a la artista mexicana a ocupar una posición de prestigio, basada principalmente en la fuerza de sus autorretratos imaginarios. Más que retratarse repetidamente así misma como una diosa, Kahlo capturó sus defectos junto con sus cualidades más atractivas. Por esta razón, su única ceja es un sello del arte del siglo XX.
Las pinturas expresan su sentido de la vulnerabilidad.
La intensa historia de Frida Kahlo y Diego Rivera comenzó cuando Frida le llevó algunos de sus cuadros al célebre muralista, para que le diera su opinión. Ella era decidida y tenia un temperamento apasionado y difícil, producto en gran parte de las secuelas psicológicas que le dejara su accidente; sus dolores constantes y su pierna deformada le daban un dramatismo y una pasión fuera de lo común.
Diego Rivera quedó impresionado no sólo con las pinturas de la Kahlo, sino con toda ella. Se enamoró locamente de la joven artista, comenzando entre ellos, a partir de allí, una relación amorosa, que culminaría en su matrimonio en 1929.
La obra de Kahlo estuvo influenciada por Rivera de forma significativa; Ambos genios y artistas, compartían su gusto por el arte popular mexicano de raíces indígenas, inspirando con sus trabajos a otros pintores mexicanos del periodo post-revolucionario.
También hay que decir que sus obras y sus vidas estuvieron y están marcadas, por la simbiosis entre los dos. Se amaban,se deseaban…se torturaban.
En 1939, la mexicana asistiria a una invitación de Andre Breton para exponer sus pinturas en Francia. Una de las obras de aquella exposición, “El Marco”- que actualmente se encuentra en el Centro Pompidou en París - se convirtió en el primer cuadro de un artista mexicano adquirido por el Museo Louvre.
Hasta entonces, Frida Kahlo había pintado solo privadamente. Incluso le costó admitir que su obra pudiese tener un interés general.
Ya apartándonos de lo artístico, si hay algo que puede afirmarse sobre Frida Kahlo, es que fue una mujer muy adelantada para la época en que vivió, quizás demasiado…
Pino Caccuci, escritor italiano que estuvo investigando a fondo desde los 80, la vida de tres mujeres que forman parte de la Memoria mexicana, entre ellas, Frida Kahlo, dijo en una entrevista:
“…medio siglo antes de que se hablara del feminismo, de los movimientos de liberación de la mujer, de tener oportunidades iguales a las de los hombres, medio siglo antes, todo esto ya había pasado en México, solo que no nos dimos cuenta, y no únicamente en Italia, sino en toda Europa”.
En el gran marasmo que fue el periodo post-revolucionario, Kahlo pudo demostrar su valor, al reclamar su derecho a ser como ella deseaba ser. Su gran encanto radica en la autenticidad con la que se lanzo a enfrentar los cánones de su tiempo; además, sembró semillas que siguen dando frutos, porque hay una conciencia que comienza con ella, y con algunas otras mujeres de aquella época, que no se ha podido apagar.
Lamentablemente, y como ocurre muy a menudo, el arte de Frida Kahlo, alcanzó fama y verdadero reconocimiento internacional, después de su muerte, a partir de la década de 1970.
La pintora latinoamericana fue la primera mujer hispana en ser ofrecida en un sello de correos de Estados Unidos de America, y dos películas notables se han producido sobre su vida: Frida, Naturaleza Viva (1983) y Frida (2002).
Fue una valiente que tuvo el coraje de decir que “había tradiciones buenas, y otras que habría que tirar a la basura, como la de ser consideradas sirvientas del hombre”.
Frida Kahlo representa la fuerza de la vida y la capacidad de transformar la adversidad en un evento artístico, en donde lo sublime, la pasión y la creación, le hicieron trascenderse, hasta llegar a ser una reconocida mujer universal.
Fuentes:
Periódico La Jornada: www.museofridakahlo.org.mx
.jpg)
.jpg)
0 comentarios:
Publicar un comentario