En los dibujos de Maitena están todas las cosas importantes, por más pequeñas que estas sean. Importantes, porque Maitena las hace universales; y lo mejor de todo es la risa que provocan, una risa de la buena, de esa que te mueve todos los músculos de la barriga y te saca lágrimas. Mientras revuelves el guiso, te viene el dibujo a la cabeza y te vuelve a dar la risa, y es como si todas las mujeres del libro estuvieran contigo un ratito en la cocina, hablando de banalidades y cosas de cada día, de cada año, de cada dia en tu vida. Maitena no tiene efectos secundarios ni dosis máxima conocida perjudicial, no caduca, no necesita nevera y se aconseja compartirla con todo lo que se mueva.
(Maitena o el Valor de lo Universal: Lesgalipes)
Hoy, en 365 Días de Valentía Moral, queremos seguir honrando el buen humor y la risa como antídotos diarios; para este fin, nada mejor que la Humorista Gráfica MAITENA.
“Empecé armando avisos en el departamento de arte de una agencia... y lo hacía muy mal. Un día quedó un agujero en un aviso, y yo dije "¿Por qué no meten una viñetita? -¿Y quién la va a hacer?", y yo dije "Yo la hago". Y empecé a hacer pequeñas viñetitas y ahí me di cuenta de que eso era un laburo(trabajo)”, relata.
La rubia argentina cuenta que de niña le encantaba leer "La Pequeña Lulú","Susy" (que chica no leia esas historias de amor en tiras comicas?), y muchas revistas que estaban prohibidas en su casa… “lo cual las hacía más atractivas, por supuesto”, comenta Maitena.
Pero tenía unos vecinos que tenían toneladas de revistas de historietas y paso toda su infancia devorándose esos dibujitos, sin siquiera pensar que ella podía hacerlos.
Sin embargo, en el instante en que se puso a hacer viñetas, se dio cuenta que sus trabajos por lo general tenían humor, o en ellos se contaba una situación, es decir, que había una narrativa en lo que hacía.
Mas tarde, a través de gente amiga, conoció toda la movida del comic europeo de principios de los “80”.
Maitena Burundena, descendiente de inmigrantes vascos que viajaron al otro lado del Atlántico, nació en Buenos Aires en mayo de 1962. Creció en un hogar de siete hermanos, que de acuerdo a sus palabras “era un hervidero de humor sarcástico y cotidiano”.
Fue largo el camino que transitó la hoy famosa ilustradora, hasta llegar a “Mujeres Alteradas”. Trabajó en muchísimos diarios y revistas argentinas como ilustradora, hasta que decidio “quedarse” en las historietas, incluso se paseó por las de corte erótico, publicadas en Europa. Fue guionista de televisión, realizadora de dibujos animados para cortos publicitarios. Pasò por todo...y es que, al fin y al cabo, tenia que mantener a su primera hija, Amaya, a quien tuvo a los 17 añitos.
Cuando se refiere a su humor dice que es “más sobre mujeres que femenino”, ya que cree que refleja más sus conductas que un punto de vista que ella misma comparta.
“He dicho alguna vez que no me embarco en un combate contra el machismo, que sin dudas existe . Somos diferentes al hombre, y ¡viva la diferencia! Lo que acepto es que tenemos los mismos derechos, pero somos diferentes".
Cuando uno lee o escucha a Maitena, percibe una fuerza y valentia en sus palabras que cautiva y sorprende. Y al ver sus viñetas, es imposible no sonreir. Nos ilustra tan bien…
“Mujeres Alteradas” es el nombre de sus famosas viñetas, y cuando le preguntan de donde saca la inspiración para hacerlas, responde:
“Hablo de algo que me pasa a mí, a veces de algo que les pasa a mis amigas, puede ser cualquier cosa... desde la celulitis, la soledad, la insatisfacción, la maternidad, tu ex, tu mamá, tu cuñado, hasta reflexiones acerca de las tetas, las cajas de fósforos, los probadores de los negocios o las noches de insomnio. Básicamente me río de lo que me hace llorar. (…) A esta altura ya casi no encuentro cosas de las que no me pueda reír”.
"Las chicas siempre tendemos y queremos hablar de lo nuestro. En cambio los hombres hablan de cine, de política, de fútbol. Es raro encontrar a un tipo que salude a otro y le diga: ¿Cómo andás?, y el otro le responda ¿Sabés que estoy angustiado?"
"Yo hace tiempo que vengo con el tema del género y lo doméstico. Y lo que creo es que mis historietas no eran para mujeres, pero empezaron a leerlas las mujeres".
Tal vez algunos de nuestros lectores habran imaginado que una mujer que se expresa tanto verbal como gráficamente de la forma en que Maitena lo hace, probablemente esté “sola”, en su campo sentimental. Pero no. Está casada, tiene tres hijos, y agrega: ”Por supuesto que de distintos padres!”.
Maitena representa la Valentía diaria, esa que brota del lado pícaro del corazón, esa que facilita con su humor y que pinta sonrisas en la gente y nos contagia alegría. Es así que Maitena Burundena ha hecho la diferencia, en un mundo que requiere risa de la buena.
Fuente: tebeosfera.com
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